WIROLAB PHARMA

“ENTREGA POR LA CALIDAD Y LA VIDA”

PENSAMIENTOS POSITIVOS

NOVIEMBRE 2014

 

TRES ARBOLES

Había una vez tres árboles en una colina. Hablaban acerca de sus sueños y esperanzas y el primero dijo: Algún día seré cofre de tesoros. Estaré lleno de oros, plata y piedras preciosas. Todos verán mi belleza.

El segundo árbol dijo: Algún día seré una poderosa embarcación. Llevaré a los más grandes reyes y reinas a través de los océanos, e iré a todos los rincones del mundo. Todos se sentirán seguros por mi fortaleza.

Finalmente, el tercer árbol dijo: Yo quiero crecer para ser el más recto y grande de todos los árboles en el bosque. La gente verá mis poderosas ramas y pensarán en el Dios de los cielos. Seré el más gran árbol de todos los tiempos y la gente siempre me recordará.

Después de unos años, un grupo de leñadores vino donde estaban los árboles. Cuando uno vio al primer árbol dijo: "Este parece un árbol fuerte, creo que podría vender su madera a un carpintero", y comenzó a cortarlo. El otro leñador dijo mientras observaba al segundo árbol: Parece un árbol fuerte, creo que lo podré vender al carpintero del puerto".

El último leñador se acercó al tercer árbol, este muy asustado, pues sabía que si lo cortaban, su sueño nunca se volvería realidad. El leñador dijo entonces: No necesito nada especial del árbol que corté, así que tomaré éste, y cortó el tercer árbol.

Cuando el primer árbol llegó donde el carpintero, fue convertido en un cajón de comida para animales, y fue puesto en un pesebre y llenado con paja. Se sintió muy mal, pues eso no era, por lo que tanto había orado.

El segundo árbol fue cortado y convertido en una pequeña balsa de pesca, ni siquiera lo suficientemente grande para navegar en el mar, y fue puesto en un lago. Y vio como sus sueños de ser una gran embarcación cargando reyes habían llegado a su final.

El tercer árbol fue cortado en largas y pesadas tablas y dejado en la oscuridad de una bodega.

Años más tarde, un hombre y una mujer llegaron al pesebre. Ella dio a luz un niño, y lo colocó en la paja que había dentro del cajón en que fue transformado el primer árbol.  El árbol sintió la importancia de este acontecimiento y supo que había contenido el más gran tesoro de la historia.

Años más tarde, un grupo de hombres entraron en la balsa en la cual habían convertido al segundo árbol. Uno de ellos estaba cansado y se durmió en la barca. Mientras ellos estaban en el agua una gran tormenta se desató y el árbol pensó que no sería lo suficientemente fuerte para salvar a los hombres. Los hombres despertaron al que dormía, éste se levantó y dijo: "¡Calma! ¡Quédate quieto!" y la tormenta y las olas se detuvieron. En ese momento el segundo árbol se dio cuenta de que había llevado al Rey de Reyes y Señor de Señores.

Finalmente, un tiempo después alguien vino y tomó al tercer árbol convertido en tablas. Fue cargado por las calles al mismo tiempo que la gente escupía, insultaba y golpeaba al Hombre que lo cargaba. Se detuvieron en una pequeña colina y el Hombre fue clavado al árbol y levantado para morir en la cima de la colina. Cuando llegó el domingo, el tercer árbol se dio cuenta que él fue lo suficientemente fuerte para permanecer erguido en la cima de la colina, y estar tan cerca de Dios como nunca, porque Jesús había ofrendado su vida en él.

 

La moraleja de esta Historia es:
Cuando parece que las cosas no van de acuerdo con tus planes, debes saber que siempre Dios obrará a tu favor. Si pones tu confianza en él, te va a dar grandes regalos a su tiempo. Recuerda que cada árbol obtuvo lo que pidió, sólo que no en la forma en que pensaba. No siempre sabemos cual es el propósito de  Dios, sólo sabemos que:
¡Sus Caminos no son nuestros caminos, pero sus caminos siempre son los mejores!